Pronóstico
El dolor asociado a la endometriosis puede manejarse a través de medios médicos y quirúrgicos, con un grado variable de recurrencia y evolución.
Los retrasos en el diagnóstico son frecuentes y ocasionan la falta de tratamiento del dolor. Los datos de la Endometriosis Association revelan una media de 10 años desde la aparición de los síntomas hasta la intervención terapéutica.[124] La concienciación de las mujeres y los médicos puede mejorar esta deficiencia en la atención, en particular en el caso de grupos más jóvenes de mujeres, que son más propensas a dichas demoras.
Es probable que el tratamiento fracase cuando no se aborden debidamente otras causas de dolor (p. ej., mialgia por tensión del suelo pélvico). Las mujeres pueden realizarse procedimientos quirúrgicos de manera repetida, lo cual no solo aumenta el riesgo de complicaciones perioperatorias, sino que tampoco tiene efecto duradero en el alivio del dolor.
Los estudios a largo plazo son difíciles y costosos de mantener. Ante la ausencia de dichos datos, es difícil brindar pronósticos generalizados. Las mujeres más jóvenes y las pacientes con enfermedad grave, no obstante, tienen más probabilidades de experimentar síntomas recurrentes.
Algunos estudios de 2020 y 2016 también han postulado un vínculo entre la endometriosis y el desarrollo posterior de enfermedad cardiovascular.[125][126] Sin embargo, esto puede estar asociado con supresión ovárica, menopausia quirúrgica anterior u otros factores de confusión en mujeres con endometriosis, y por lo tanto, se requieren más investigaciones en este área.
Endometriosis y subfertilidad
El pronóstico para mujeres subfértiles con endometriosis varía y depende de varios factores, como la edad, la anovulación, la función tubárica y el factor masculino. Se encuentran disponibles datos nacionales de los Estados Unidos en relación con el éxito de la fertilización in vitro (FIV) por diagnóstico. Society for Assisted Reproductive Technology Opens in new window Un estudio poblacional realizado en el Reino Unido con casi 15,000 mujeres, seguidas durante más de 30 años, comparó mujeres con endometriosis documentada quirúrgicamente con aquellas mujeres sin enfermedad conocida. Los investigadores encontraron una relación estadísticamente significativa con antecedentes positivos y complicaciones obstétricas en el primer y tercer trimestre.[127]
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